Sin Limites

Sin Limites (Limitless, USA, 2011) del director del Ilusionista (para aquellos a los que les gustó) Neil Burger quien nos trae la adaptación de la novela Los campos oscuros de Alan Glynn. Thriller de acción y misterio en escenario SciFi.

En los tres primeros minutos Bradley Cooper, el Will Tippin de Alias, me cautivó en su papel de escritor zarrapastroso y bloqueado, y luego me reconquistó en su evolución a yonki superdotado.

¿Y si existiera una droga de diseño capacitada no para hacerte tripear sino para sacar al 100% todo tu potencial? ¿Si una píldora despertara las partes oscuras o subutilizadas del cerebro y pudieses recordar asimilar y relacionar toda la data a la que has sido expuesto durante la vida?

¡Todos queremos consumir NZT ya!

Todos nos anotaríamos y haríamos fila para obtenerla, gozarla y sacarle provecho hasta que alguien empiece a perseguirnos para quitárnosla o empecemos a perseguir a alguien para quitársela.

Advertencia se determinado que consumir NZT causa muerte.

Oh! sorpresa si de dejas de tomarla no sólo vuelves a ser el medio ser que eras antes sino que además te vas a morir.

¿Por qué ver esta película? Excelente actuación de Cooper, y más le valía esta película la produce él y es su trampolín a ‘no sólo soy actor de comedia, puedo dar más’

Deliciosa dirección que enfatiza los trips con unos filtros de color sobreexposición lumínica alucinantes (adecuados pues).

Tienes unos apreciables toques humorísticos al estilo de Guy Ritchie. La escena del departamento es sencillamente estrambótica. Es el momento en que para unos la película se va al infiernos u otros como yo se desternillan de risa.

El film además ofrece a los intensos material de conversación para acompañar con su café número 50 del día: hay una reseña que habla de los iluminati y los masones, otras de trastornos de personalidad, desdoblamientos y las que más me gustan son las existencialistas.

En vez de ¿Quièn soy? Nos preguntaremos ¿Dónde está mi pastillaaaaa?

Dato Curioso: me la han recomendado ver dos personas y ya la había visto.

Bradley Cooper sí habla francés. El film alcanzó el número 1 de la taquilla recaudando cerca de 50 millones de dólares a partir de unos 27 de presupuesto, es decir un éxito redondo de inversión, recuperación y calificación del público.